El techo de cristal es una
superficie superior invisible en la carrera laboral de las mujeres, difícil de
traspasar, que impide seguir avanzando. Son elementos psicosociales que impiden
que las mujeres, a pesar de tener la misma cualificación y méritos que sus
compañeros, no accedan a los puestos de máxima responsabilidad.
La plena participación
de las mujeres en las tareas de dirección y de toma de decisiones todavía es un
desafío importante. Y la desigual participación de las mujeres en los niveles
donde se ejerce influencia, poder y autoridad, hace que no sean ellas las que
finalmente decidan o participen en la toma de decisiones sobre el destino
político y económico de nuestra sociedad.
Las causas de que
exista esta superficie que no se puede ver pero que si existe son; prejuicios
sobre la capacidad de la mujer en los puestos de dirección. Coincidencia de la
maternidad con el desarrollo de la carrera profesional. Dificultades para la
formación. Sobrecarga de roles familiares y laborales.
Información extraída de:
Instituto de la Mujer
y Para la Igualdad de Oportunidades. Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales
e Igualdad.